El diseño de paisajismo de este desarrollo de uso mixto se centra tanto en la planta baja como en un podio en el techo de un gran zócalo de tres pisos, que une los distintos edificios del emplazamiento. El paisajismo en la planta baja y los espacios de la plaza establecen grandes plazas de esquina que guían el movimiento hacia y desde el desarrollo. Los grupos de árboles están colocados de manera informal en todo el recinto como contrapunto a la formalidad del pavimento que une las plazas. Los árboles Delonix colocados cerca de la caja de cristal sur y en las escaleras que llevan al podio elevado con elementos de paisajismo marcan sus principales puntos de ingreso.
Los jardines del podio, que se elevan tres pisos desde la planta baja, refuerzan aún más la conexión de los ambientes internos y externos y responden con fuerza a la forma curvilínea de un tragaluz escultórico en el mismo nivel. Abundan las zonas de asientos al aire libre para las tiendas interiores, formando una suave conexión entre el jardín del podio y los edificios que lo rodean. Los árboles cubren la parte superior del podio para crear áreas de sombra más frescas para los usuarios, y los bordes del podio están delimitados por cercos de plantas de bambú y acentuados por esculturas y maceteros expresivos. La paleta de materiales se hace eco del paisaje de la planta baja, y se mantiene una paleta coherente en el interior y el exterior para crear un entorno suave y conectado en ambos niveles.
El área de llegada del Mandarin Hotel se ha diseñado para asegurar una circulación sin inconvenientes de vehículos y peatones, y también para recibir a los huéspedes de una manera acorde con la identidad del hotel. La arquitectura contemporánea y digna se refleja en la plaza, con árboles y plantas afirmadas que crean una amortiguación entre el hotel y la calle.
* CERTIFICACIÓN LEED PLATINUM | Primer centro comercial cerrado en lograr este reconocimiento